En el momento que estés ante un ataque de ansiedad y no sepas qué hacer, te recomendamos que tengas en cuenta las siguientes estrategias.
Dormir bien es esencial para manejar la ansiedad. Durante el sueño se restablecen las funciones cognitivas y emocionales. Intenta establecer una rutina de sueño normal; irte a la cama y levantarte a la misma hora cada día mejora la calidad del descanso.
Llevar un registro escrito de los sentimientos y situaciones que generan estrés para utilizarlos como apoyo en el proceso terapéutico.
Cuando sientas que la ansiedad o los nervios se intensifican, intenta estas técnicas en el momento:
Establecer horarios regulares para acostarse y levantarse ayuda a regular el ciclo de sueño y promover un descanso reparador. Intenta acostarte y levantarte a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana.
Movimiento ocular: Se sigue con la mirada el dedo del terapeuta o un objeto (como una luz) mientras se mueve en el campo visual.
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Un terapeuta puede ayudarte a desarrollar estrategias de afrontamiento, proporcionar apoyo y acompañamiento durante el proceso, así como ayudarte a explorar si existe alguna causa o desencadenante específico de tu ansiedad.
Algunas infusiones de hierbas, como la manzanilla o la lavanda, tienen propiedades relajantes y pueden ayudar a reducir la ansiedad. Explora diferentes opciones de tés relajantes y encuentra el que más te guste.
Los ejercicios de respiración profunda son una excelente manera de reducir la ansiedad y promover la relajación.
La función de meditación de GitMind puede ser una herramienta valiosa para gestionar la ansiedad y aprender a calmar un ataque de ansiedad. Al configurar un temporizador para tu sesión de meditación, puedes concentrarte en tu respiración y despejar tu mente, lo que ayuda a reducir el estrés.
Relajación muscular progresiva: tensa y relaja diferentes check here grupos musculares, empezando por los pies y terminando en la cabeza, para liberar la tensión acumulada en el cuerpo.
Fomentar las interacciones sociales y mantenerse en contacto con seres queridos para evitar el aislamiento.
La meditación de atención plena o Mindfulness es una práctica antigua que consiste en centrarse en el momento presente y aceptarlo sin juzgarlo. La práctica regular de la atención plena ha demostrado reducir la ansiedad y el estrés al promover la relajación, aumentar la autoconciencia y fomentar la resiliencia emocional.